Diccionario básico de canarismos.
Letra P (V)
Peringola:
1. f. LP. Copa del árbol.
Perinola:
1. f. LP. Trompo pequeño que se hace girar con los dedos, perindola.
Perinquén:
1. m. Or. (Tarentola spp.) Reptil más pequeño que el lagarto, de unos diez centímetros de largo, de color canelo o gris oscuro, con verruguitas en la piel. Vive en lugares pedregosos y en las casas, a cuyas paredes y techos se adhiere con facilidad. Se alimenta durante la noche de pequeños insectos. En otras zonas de Canarias se conoce con los nombres de cherenque, perenquén, pracan, salamanca y rañosa.
Periquito:
1. m. (Impatiens balsamina) Planta de jardín de la familia de las balsamináceas, de aproximadamente medio metro de altura, tallo tierno y aguanoso, hojas alternas y lanceoladas, flores generalmente rojas, blancas y rosadas y fruto aovado que, estando maduro, arroja con fuerza la semilla cuando se le toca.
Perlujo/ja:
1. adj. LP. Impertinente, molesto, generalmente por dolor o incipiente enfermedad, sobre todo referido a los niños y a los ancianos. Mi nieto lleva perlujito dos o tres días por los dientes.
Pernada:
1. f. GC. Conjunto de las ramas que forma cada una de las secciones de un árbol. El viento me tumbó una pernada grandísima del nisperero.
2. f. Lz. En ciertos sedales de pesca, arco pegado al chumbo en cuyos extremos se coloca el nailon donde se empatan los anzuelos.
3. f. GC. Alud de tierra y piedras de grandes dimensiones.
Pernalbo/ba:
1. adj. Fv y Tf. Dicho de una cabra, que tiene una o las dos patas traseras de color blanco.
Pernear:
1. v. Tf. Moverse, agitarse convulsivamente.
2. v. Tf y Hi. Lidiar, trabajar hasta el agotamiento.
3. v. Hi. Decir algo de manera insistente.
Se pronuncia generalmente perniar.
Peroluí:
1. m. Lz, Fv y LP. Peroluís.
Peroluís:
1. m. Lz, Fv y LP. (Burhinus oedicnemus) Ave de cabeza redondeada, patas largas y amarillas, pico relativamente corto y grandes ojos amarillos. De costumbres crepusculares o nocturnas, habita en terrenos descubiertos, pedregosos o arenosos. Se denomina de este modo por su característica forma de llamar. El plumaje del peroluís es pardusco y tiene a lo largo del cuerpo muchas hileras de oscuras manchitas intermitentes.
Perralla:
1. f. GC y Go. Chusma, conjunto de gente de baja consideración social. Se iba a cambiar de barrio porque decía que no aguantaba aquella perralla.
Perrera:
1. adj. Tf. Se decía de las guaguas urbanas cuyo billete costaba una perra gorda. Antes de irse para Venezuela, trabajó de cobrador en las guaguas perreras.
Perreta:
1. f. Rabieta de niño.
2. f. Or. Enfado grande.
3. f. Or. Idea fija en que se insiste molesta e importunamente.
Perrete:
1. m. Lz y Fv. Idea obsesiva. Ese perrete le duró una partida de meses.
Metérsele a uno algo en el perrete. Lz y Fv. Obstinarse en alguna cosa. Se le metió en el perrete que tenía que salir, y salió.
Perretoso/sa:
1. adj. GC. Insistente, obstinado, machacón. Le decían el Perretoso porque siempre estaba machacando sobre lo mismo.
Perretudo/da:
1. adj. GC. Perretoso.
Perrillo:
1. m. Fv. Pequeño caracol marino alargado, habitado por una cangrejilla.
Perrito:
1. m. (Bulweria bulwerii) Ave marina de unos 30 centímetros, de color totalmente negro, excepto la barbilla, que es grisácea. Su voz recuerda al ladrido de un perro. Nidifica en roques y en zonas costeras apartadas. En algunas zonas de Canarias se conoce también con el nombre de pepinero.
2. m. Lz. Perrillo.
3. m. Juego infantil colectivo consistente en que un jugador, llamado el perrito, intenta hacerse con la pelota que se pasan entre otros. Cuando consigue arrebatársela a uno de ellos, este ocupa el lugar del perrito.
Perro:
Si es un perro, me, te, lo, etc. , muerde. Frase que se emplea cuando, por inadvertencia, no se repara en algo que se busca y que sin embargo está próximo.
Perruño:
1. m. Lz, Fv y Hi. Porriño.
Pescadito:
1. m. Fv. (Lepisma saccharina) Insecto tisanuro, común en las casas y bibliotecas, donde se alimenta de papel y restos orgánicos; lepisma.
Pescado:
1. m. Animal acuático vertebrado. Desde la orilla se veían los pescados saltando en el agua.
Pescado de arrimo. Lz y Fv. El que se acerca a la orilla en determinadas temporadas.
Pescudar:
1. v. Tf. Sonsacar arteramente.
Pesebrera:
1. f. Occ. Pesebre.
Pesquero:
1. m. Sitio o lugar de la costa o del mar, a donde se acude a pescar frecuentemente. Decían que esa baja era un buen pesquero de viejas.
Pestanear:
1. v. GC y Tf. Pestañear. Cuando está viendo el programa de folclore, mi marido ni pestanea.
Se pronuncia generalmente pestaniar.
Pestillera:
1. f. Cerradura de las puertas. Cuando se fue el inquilino, le cambió la pestillera a la puerta de la calle.
2. f. Tf. Mujer chismosa y enredadora. Es medio pestillera, siempre trayendo y llevando cuentos.
3. f. Tf. Prostituta.
Pestina:
1. f. LP. Mal olor. La depuradora echaba una pestina, que tiraba para atrás.
Pestiñoso/sa:
1. adj. Lz y Tf. Legañoso.
Peta:
1. f. Corvadura anómala y abultada de la columna vertebral. Con la edad parece que le iba creciendo la peta.
2. f. Tf. Joroba del camello. Dicen que los camellos tienen dos petas, pero yo aquí no he visto sino camellos de una peta sola.
Petaco:
1. m. Persona de pequeña estatura y por lo general regordeta. Es un petaco, pero lo disimula un poco poniéndose unos tacones altos.
Petafio:
1. m. Go. Objeto pequeño.
2. m. Go. Cantidad pequeña de algo.
Petafo:
1. m. Go. Niño de poca estatura para su edad.
Petequén:
1. m. Go. Piedra pequeña o trozo de piedra.
Peto:
1. m. (Acanthocybium solandri) Pez de la familia de los atunes, de cuerpo alargado y fusiforme, de color azul por el lomo y más pálido por el vientre, que alcanza hasta dos metros de longitud. Se encuentra en pequeños grupos cerca de la superficie del agua.
2. m. GC y Tf. (Dendrocopos major) Ave trepadora, de plumaje negro manchado de blanco en las alas y el cuello; pico largo y delgado, pero muy fuerte. Se alimenta de insectos, que caza entre las cortezas de los árboles. Los machos tienen una llamativa banda roja en la nuca y en la región anal. Su hábitat es el pinar canario. U. t. c. adj.
3. m. Lz y Fv. Protuberancia que tiene la sama macho en la parte alta de la cabeza.
Hartarse como un peto. Tf. Estar absolutamente saciado tras la ingestión de comidas o de bebidas, o de ambas cosas.
Petón:
1. m. Tf. Elevación rocosa del fondo marino cubierta de algas, adonde va a comer el pescado. En esos petones es donde está el pescado.
Petriñuela:
1. f. LP. Bragueta.
Petromax:
1. m. Lámpara de petróleo.
2. m. Lámpara de petróleo grande que usan ciertas embarcaciones de pesca para atraer a los peces.
Petudo/da:
1. adj. Que tiene peta. Él no es petudo, pero lo llaman el Petudo porque el padre sí lo era.
Trabajar como un petudo. Trabajar mucho y sin descanso.
Pezoña:
1. m. Tf y Go. (Ocypus olens) Escarabajo negro y alargado que se defiende levantando el abdomen como los escorpiones o alacranes, aunque, a diferencia de estos, es inofensivo. En otras zonas de Canarias se conoce con los nombres de alacrán y arraclán.
Pi:
1. Voz que, usada repetidamente, se emplea para llamar a las gallinas.
Pianín:
1. m. Lz. Piano, armónica.
Piano:
1. m. Armónica, instrumento musical provisto de una serie de orificios con lengüeta, que se toca soplando o aspirando por ellos. En algunas islas, como en Tenerife o El Hierro, se dice también piano de boca.
Piaña:
1. f. LP. Pedal del telar.
Pibada:
1. f. Tf. Conjunto o concurrencia de pibes o pibas. La pibada de hoy es muy amante de los juegos electrónicos.
Pibe/ba:
1. m. y f. Niño, muchacho adolescente. Son pibes que están en la edad de la bobería.
2. m. y f. Novio. Tiene un pibe desde hace dos años.
Piberío:
1. m. Conjunto de pibes o pibas. Las madres se sentaban alrededor vigilando al piberío.
Pica:
1. f. Tf y LP. Acción de inutilizar el racimo de plátanos para la exportación, mediante algún tipo de corte o marca.
2. f. Tf. Especie de azada que tiene forma de horquilla y que se emplea sobre todo para coger papas.
Picadera:
1. f. GC, Tf y Go. Mar picada.
Picadero:
1. m. Or. Taco de madera, generalmente algo ahuecado en el centro, que usan los pescadores de bajura para machacar el erizo u otra clase de engodo.
2. m. Tf y LP. Tronco donde se pica la rama o el monte para el ganado. Colocó el picadero a la entrada de la cuadra, y se puso a picar unos flejes de monte para la cama del ganado.
Fuente: Academia Canaria de la Lengua.
0 comentarios:
Publicar un comentario